El confinamiento por la pandemia de la COVID-19 y consiguiente parón en la actividad económica no parece haber sentado muy mal al mercado inmobiliario de nuestra provincia. Y es que, según el informe publicado por el portal inmobiliario Idealista.com, en el mes de mayo los precios de la vivienda usada en Cuenca tan solo han bajado un 0,1 por ciento hasta los 762 euros por metro cuadrado, si bien es el más bajo de todo el país. Le siguen las provincias de Toledo y Ciudad Real, con 767 y 793 euros por metro cuadrado, respectivamente.
Una tendencia a la baja que no solo se reduce a la vivienda usada de nuestra provincia, sino que también se da a nivel nacional, con una caída media del 1,3 por ciento. Todo lo contrario, por cierto, a lo experimentado por la capital conquense, donde en mayo los precios han crecido un 4,6 por ciento, la segunda subida más alta del país en capitales de provincia, solo superada por Soria, con un incremento del 5,5 por ciento. Detrás de la capital conquense se sitúan Ávila, con un aumento del 2,9 por ciento; Valencia, con un 2,7%; San Sebastián, con un 2,6; y Cáceres, con un 2,5.
A pesar de la notable subida registrada en este periodo, el precio de la vivienda usada en Cuenca capital se sitúa en los 1.055 euros por metro cuadrado, que la convierten en la segundo capital del país con la vivienda usada más barata, solo superada por Lleida, donde el precio medio por metro cuadrado asciende en la actualidad a 1.053 euros.
La vivienda usada en Castilla-La Mancha, por su parte, cuesta en el mes de mayo un 1 por ciento menos que en abril hasta situarse en los 861 euros por metro cuadrado. Nuestra comunidad autónoma ha sido una de las trece que han visto bajar el precio de la vivienda usada en este periodo. Ranking encabezado por Navarra, con un descenso del 2,1 por ciento, y seguida de Cataluña, con una caída del 1,9%; Aragón, y Canarias con un 1,5%; Cantabria, con un 1,2; Castilla-La Mancha, con un 1%; Galicia y La Rioja, con un 0,8; Comunidad de Madrid, con un 0,7; Castilla y León, con un 0,6; Asturias y País Vasco, con un 0,4; y Murcia, con un 0,2.
Los precios, sin embargo, se mantuvieron estables en Andalucía, mientras que crecieron en las provincias de Baleares (+0,5%), Comunidad Valenciana (+0,4) y Extremadura (0,2).
