Escandalosa ignorancia del presidente del CSIF-Cuenca
Días atrás, después de haber sido solicitada en diversas ocasiones, se celebró una reunión entre Pablo Torrijos, Presidente del sindicato CSIF en Cuenca, y diversos afectados por la sentencia referida a la Oferta de Empleo Público 2007 del Ayuntamiento de Cuenca.
De esta reunión se extraen las siguientes conclusiones, basadas en lo allí manifestado:
- El Sr. Torrijos ha dejado claro desconocer, en su totalidad, por qué se anula la Oferta de Empleo Público. Además, reconoce que la sentencia anulatoria de la oferta se “guardó” 28 meses en un cajón, retrasándose así su ejecución, aunque, añade “no fui yo quien lo hizo”.
- No tiene ninguna intención de conocer el tema, a pesar de que se trata de un asunto que podría suponer que 20 funcionarios municipales perdieran su puesto de trabajo y echa balones fuera dejando la impresión de ser un títere manejado por otros.
- El sindicato CSIF está en manos de determinados personajes que lo están utilizando, saltándose a los propios militantes, para conseguir sus oscuros fines. En este sentido, el Sr. Torrijos llegó a manifestar: “son ellos los que tienen que tener idea, yo no”, refiriéndose a los servicios jurídicos del sindicato, dejando claro que se limita a firmar los documentos que le ponen delante, en una actitud absolutamente patética.
- El Sr. Torrijos ha dado una lamentable imagen de liberado agradecido que se presta a todo por mantener su estatus. Sus expresiones (“no conozco el proceso ni lo voy a conocer”) y su desconocimiento del tema muestran lo triste de su comportamiento.
- El abogado, al que el Sr. Torrijos le ha atribuido los poderes en este asunto de la ejecución, es Luis Felipe Valero García, también presente en la reunión y militante de ese sindicato, quien dejó clara en todo momento su animadversión personal hacia el alcalde, con quien reconoció tener una guerra “hasta el día que me muera”, y al que aludió durante la reunión usando gruesos insultos que, aseguró, utiliza habitualmente para referirse a él.
- El letrado Valero ha mostrado, en todo momento, una actitud despectiva ante los afectados y su futuro, dejando patente la línea adoptada por ese sindicato, fuera de todo interés sindical. De hecho no se olvidó de relacionar los nombres de otras personas, amigas suyas que también, según él, habían sido perjudicadas, dejando claro su objetivo: la venganza.
- En esa reunión se nos recordó que, en su momento, el sindicato CSIF había propuesto al Ayuntamiento, para su negociación, un conjunto de puntos referidos al personal municipal. Al no haber sido atendida, según el sindicato, esta petición el letrado Valero manifestó: “no vamos a solucionar sólo lo que queréis vosotros y el alcalde”. Añadió, lo que demuestra el verdadero fin de sus actuaciones contra nosotros, que “si se hubiera solucionado lo propuesto, se habría solucionado lo vuestro”. Esta actuación tiene un nombre: chantaje.
- Ha quedado claro, en todo momento, que los afectados somos la munición utilizada por el sindicato y los que lo manejan (encabezados por el letrado Valero) en su lucha contra el Equipo de Gobierno municipal.
- Este sindicato y todos sus responsables han quedado desacreditados al convertirse en verdugos de sus propios compañeros y representados.