Los investigadores Israel José Pérez y José Vicente Cambronero coinciden en asegurar que “la Diputación cuenta con un patrimonio escultórico y pictórico a la altura de un museo de artes plásticas extraordinario”.
Y así lo pusieron de manifiesto durante su conferencia sobre el legado artístico de la institución provincial que ofrecieron el viernes por la tarde en el salón de actos dentro de las Jornadas Re-Descubriendo el Palacio de la Diputación Provincial de Cuenca, organizadas por el centro asociado de la UNED de Cuenca y la Real Academia Conquense de Artes y Letras (Racal).
Al acto acudió el presidente de la Diputación, Benjamín Prieto, que estuvo acompañado del director de la UNED en Cuenca, Miguel Ángel Valero.
Según una nota de la institución provincial, tanto Pérez como Cambronero remarcaron la relevancia del rico legado de la Diputación, que, en el caso de la escultura se circunscribe al siglo XX, mientras que la pintura abarca un periodo mucho más amplio, desde finales del siglo XVI, con el cuadro de San Julián, hasta la actualidad, destacando sobre todo las obras de los siglos XIX y XX.
Pérez aseguró que entre la colección escultórica de la entidad se encuentran “los mejores artistas que ha dado esta tierra”, desde Luis Marco Pérez y Fausto Culebras hasta Leonardo Martínez Bueno, Vicente Marín o Miguel Zapata.
En cuanto al patrimonio pictórico, Cambronero destacaba que hay unos cuarenta autores, entre los que se encuentran artistas de la talla de Benito López Chust, Gustavo Torner, Antonio Saura, Pagola, Lillo, Julián Grau Santos, Moset, Goñi o Fernando Zóbel, y obras de gran singularidad como Fantasía de Cuenca, de Goñi, o un bodegón de Torner de su etapa figurativa.
El problema de la dispersión
Obras que se encuentran diseminadas por las distintas dependencias de la Diputación, desde el Palacio Provincial y las sedes del Departamento de Cultura y Deportes y del Organismo Autónomo de Gestión Tributaria y Recaudación hasta los almacenes. A juicio de ambos, esta dispersión sería el principal hándicap en caso de optar por la creación de un museo de artes plásticas.
Para complementar la conferencia del viernes, el público ha podido disfrutar este sábado de una visita guiada, a cargo de estos dos investigadores, por el Palacio Provincial y sus jardines. Los participantes han conocido las obras de escultores del renombre de Miguel Zapata, Luis Marco Pérez, Fausto Culebras o Vicente Marín, así como de pintores de la talla de Benito López Chust o Víctor de la Vega. A la visita también ha asistido el diputado de Cultura, Francisco Javier Doménech.
Arquitectura del Palacio Provincial
Además, con anterioridad a la ponencia sobre el patrimonio artístico, el arquitecto y gerente del Consorcio Ciudad de Cuenca, Daniel León, ofrecía una conferencia sobre el Palacio Provincial y la arquitectura del siglo XIX, en la que hizo un recorrido por las distintas sedes de la institución, desde el antiguo Convento de Carmelitas Descalzos y el edificio Palafox, hasta el Palacio Provincial, en el que se centró especialmente.
Un edificio neoclásico, obra del arquitecto provincial Rafael Alfaro, que, según detalló León, comenzó a construirse a finales del siglo XIX y se concluyó a principios del XX, experimentando en los ochenta una importante remodelación en su cubierta, a cargo del arquitecto Arturo Ballesteros, que le otorgó su actual aspecto. Intervención a semejanza de la arquitectura francesa que, a su juicio, fue “todo un acierto”.
Un inmueble de especial relevancia para León, puesto que se trata del único palacio en la actualidad en la ciudad, con el que, además, los diputados del momento lograron su máxima ambición, que era que la Diputación contará con una sede permanente y a la altura de la importancia de la institución, lo que se vio reforzado con los jardines.
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