Verano a tope

Con las imágenes aún presentes en la memoria de su vacacional estancia por salmantinas y extremeñas tierras, de la pulcra elegancia arquitectónica del conjunto histórico artístico de las antiguas casas chacineras de Candelario –sorprendente la original funcionalidad de sus batipuertas– rumoreadas por el acuático ritmo de sus fuentes y regueras a la espléndida representación nocturna que al hilo de las celebraciones de la fiesta de Los Conversos volvieron a poner en pie los vecinos de Hervás a la orilla del Ambroz –las populares construcciones de su judería como espectacular telón de fondo–, por citar tan sólo dos ejemplos de lo disfrutado, torna el articulista a sus predios capitalinos conquenses bajo los admonitorios consejos que los medios de comunicación nos suministran sobre cómo sobrevivir con bien a la nueva ola de calor de un verano que a lo que se va viendo viene, y a lo que parece así va a seguir, haciéndose sentir pero que a modo. Bienvenida sea pues la ayuda que para mejor soportar tan plena canícula, a más del refrescante auxilio que, en la medida que nuestras obligaciones nos lo permitan, nos pueda brindar cualquier posible playero o piscinero chapuzón durante el día, para, tras la atardecida, demorar en la calle, a la caza del posible soplo de fresco nocturno, el ingreso en el lecho, junto a la habitual cumplida oferta de parques y terrazas de bares, el recién presentado programa de actuaciones de “Veranos en Cuenca” que, finalizada ya, a lo que se ha dicho con pleno éxito, la oferta de Estival 2017, se va a iniciar este mismo viernes 14 en que aparece este texto en la recoleta plaza de la Merced con la actuación de la Joven Orquesta de la ciudad y que aunará en su agenda la música –acordeón, jazz, folk, incluso ópera– con el teatro o el entrañable cine bajo las estrellas. Con ello, amén del siempre práctico uso de abanicos, ventiladores y tal cual aparato de aire acondicionado para quienes los posean y aguanten –que no todo el mundo les da su placet a tales maquinarios– esperemos soportar el rigor del termómetro de la mejor manera posible que es lo que, al igual que para él propio, les desea en su regreso quien, olvidándose de más serios temas que ya habrá tiempo de frecuentar, ha querido hoy dedicar su semanal entrega a animarles a que pasen estos calores lo mejor posible. Vamos a ello.