'José Luis'

Redactor jefe del Diario de Cuenca, director y cofundador de la hermosa aventura de la revista El Banzo, director del semanario Gaceta Conquense, director y editor de las revistas Olcades y Ciudad de Cuenca y del periódico de información municipal La Ciudad, columnista en El Día, en Las Noticias y en La Tribuna, colaborador de Radio Nacional, corresponsal en su día de medios como Europa Press, El País o Televisión Española, el hacer como informador de José Luis Muñoz Ramírez es, amén de sus otras actividades como gestor cultural –director de la Fundación de Cultura, organizador de Ferias del Libro– o cinematográfico –fundador y sostenedor sin desmayo del cine club Chaplin– y editor de temas y autores conquenses –de Publicón a Ediciones Olcades– no sólo historia viva del periodismo conquense contemporáneo –del que, junto a investigadores como Ángel Luis López Villaverde, Isidro Sánchez o Francisco Javier Page es, por otro lado, uno de sus mejores conocedores en su triple condición de protagonista, testigo y estudioso– sino, sin género alguno de duda, su ejemplo más noble y destacado. Maestro directo o indirecto de tantos como a lo largo de los años tuvimos la suerte de o bien trabajar más o menos tiempo bajo sus directrices y/o compartir desde distintas cabeceras o indicativos el día a día del oficio –bien orgulloso estoy de poderme incluir entre ellos– su hacer no sólo fue siempre paradigma de un espléndido ejercicio profesional que aún hoy podemos seguir apreciando en su labor como articulista, sino continuado y claro testimonio de una conducta ética impecable, tanto aquél como, muy especialmente, ésta cualidades especialmente remarcables en unos momentos como los actuales en donde, para desgracia de todos, periodistas y sociedad, tanto reinan –con las honrosas excepciones que cabe hacer que, loado sea Dios, también existen– no sólo un descorazonador desprecio al decir veraz y a la constatación de fuentes y hechos e, incluso, para más inri, al propio buen uso del lenguaje, sino, aún más grave, la propia manipulación torticera e interesada. Bienvenido sea por ello ese premio que la Asociación de la Prensa de Cuenca, reconociendo esa trayectoria, le ha otorgado y que este jueves se le entregaba en ese Teatro Auditorio al frente del cual dio también, durante años, ejemplo de entrega y eficacia; una distinción –que viene a unirse a otras ya recibidas como el Premio Ángel Pérez Sáiz o la de Socio de Honor de la Biblioteca de Castilla La Mancha– cuya concesión aplaudo desde el propio y personal agradecimiento a cuanto, a más del tesoro impagable de su amistad, me dio y sigue dando. Gracias, José Luis, en nombre de la profesión, quiero creer que también de esta sociedad conquense a la que tanto y tan bien has servido, y, desde luego, cual acabo de decir, por cuanto personalmente me has brindado.