Top Queens: una catedral de la moda

Una catedral de la moda. Así define a la franquicia Top Queens su responsable en Cuenca, Ana Belén Parra, al frente de la misma, junto a su marido Antonio Forriol, desde su inauguración el 20 de mayo de 2016. En sus estantes el cliente puede encontrar desde unas sandalias playeras a zapatos de piel, bolsos o complementos de todo tipo para realzar desde un vestido informal a uno ibicenco, de encajes con puntillas, de viscosa o de seda así como ropa de hombre de estilo inglés. 

Artículos “que llaman la atención y sorprenden por lo buenos y baratos que son”, ya que pueden adquirirse al mismo precio: 25 euros. En campañas puntuales, el precio puede ser algo más bajo o alto, “pero la base, al 95%, es el precio único de 25 euros”, un precio “ya rebajado todo el año, porque es muy difícil encontrar un artículo de estos a 25 euros”. 

Productos que provienen desde Elche a París, Alemania o Italia, “hay mil proveedores y en eso se basa el truco, en que no hay uno solo y exclusivo”. “Cada vez hay gente más competitiva, casas más nuevas que ofrecen productos mejores, a mejores precios y es ir buscando las nuevas marcas”, indica. 

Aseguran que la acogida de su propuesta ha superado las expectativas iniciales, pues los conquenses han “entendido muy bien el concepto de precio único, el saber exactamente lo que se van a gastar llevándose una calidad muy buena”. 

Se trata de artículos completamente exclusivos, inispirados en grandes marcas y en los que la relación calidad-precio “es única, la cuidamos mucho”. El secreto: asociarse a una red de tiendas que defienden el mismo concepto de precio único y realizan pedidos conjuntos, lo que les permite conseguir un precio “muy bueno”. 

Al frente, explica, “gente muy hábil, muy joven, que se está moviendo constantemente por París, Londres o Alemania y están siempre a la última”. De momento, el perfil de cliente es muy amplio.

Una filosofía “totalmente diferente” al que ha distinguido siempre a Centro Moda, negocio familiar de su pareja, Antonio Forriol. 

“Lo primero que hicimos fue hablarlo con su padre, que estuvo tocando el género y nos dijo: de cabeza”, asegura, aseverando que fue él quien les “ha enseñado todo, empezando por saber tocar las telas a todo lo demás, ha sido una referencia”. 

Además, deja claro que su meta “no es hacerse rica, sino tener un sueldo más y ofrecer un producto que no esté visto en Cuenca”, ya que no son “ambiciosos”. “Ilusionada, no, lo siguiente”, afirma que el camino “ha sido muy duro, porque requiere echar todo lo que puedas en dinero, tiempo e ilusión”. “Es como un niño, como aquel que dice”, concluye, para agregar que, si los conquenses “siguen confiando, les sigue gustando y siguen viniendo, estaremos muchísimos años”. 

Ana Belén Parra confiesa que su obsesión es que el cliente “quede muy contento”, porque la atención “es total”.  “Damos un servicio de boutique a 25 euros”, subraya, ya que, “al igual que la tienda es muy fiel con la calidad y los precios”, cuenta con una clientela muy fiel “y es lo que más hay que cuidar”. 

Ubicado en pleno centro de Carretería, el germen de este proyecto fue la sección femenina, a la que siguió, en el mes de octubre, el apartado de hombre. El próximo mes de septiembre se completará con la sección dedicada a niños.