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"El museo de Cuenca tendrá su propia personalidad"

"El Archivo es el edificio perfecto porque tiene pocas ventanas y el público se concentrará en las obras y no en las vistas"
"El museo de Cuenca tendrá su propia personalidad"
10/07/2017 - N. Lozano

El año pasado visitó la capital conquense y quedó impactado por su belleza y sus museos. Por eso decidió convertirla junto a Toledo en destino de su valiosa colección de arteAsegura que supervisará los trabajos personalmente porque "yo he hecho el amor con todas las obras de mi colección, creo que las conozco mejor que nadie"

No todos los días se tiene la oportunidad de conversar con el hombre que posee una de las colecciones de arte contemporáneo más importantes de todo el mundo. E impone. Pero una vez que comienzas a hablar con Roberto Polo, mecenas y filántropo cubano-estadounidense, es difícil no rendirse a su cercanía, a su trato exquisito y a ese entusiasmo y pasión contagiosa que demuestra hacia el mundo del arte. 
 
A punto de cumplir 66 años, dice que una de sus frases favoritas es la que pronunció Alejandro Magno al final de su vida: ‘Aquí están mis manos, las tengo vacías, no me llevo nada’. Y eso es lo que Polo pretende, que todas sus colecciones puedan ser disfrutadas para la eternidad. La cesión de 7.000 obras que ha formalizado con el Gobierno regional marcará un antes y un después en la oferta cultural de esta región y una buena parte vendrá a Cuenca. Concede pocas entrevistas, pero ha sacado un hueco para atender a Las Noticias y hablar de este importante proyecto expositivo para nuestra ciudad.
 
P.-¿Qué valoró de Cuenca a la hora de tomar la decisión de ceder su colección?
R.-Fui a Cuenca a finales de junio de 2016, al día siguiente de recibir el premio de la revista Capital Arte a la labor de mecenazgo internacional. Si no hubiese conocido antes la ciudad no hubiese tomado ninguna decisión. Para mi Cuenca es un símbolo del arte abstracto y moderno no solo en España, sino también a nivel internacional porque muchos artistas extranjeros han vivido y trabajado allí,  sobre todo muchos alemanes y americanos. Como lugar en la naturaleza es impresionante, es increíble ese perfil de ciudad suspendida. Además, tiene museos que fueron fundados sobre la base de colecciones privadas. El Museo de Arte Abstracto Español es fascinante.  Vi también una ciudad muy limpia a la que los turistas que van lo hacen solamente por el arte. No tiene tanto turismo como Toledo, pero el que visita la ciudad y se desvía de la ruta para ello es porque le interesa el arte por una razón específica. 
 
P.-¿Le parece por tanto un marco digno para albergar sus obras?
R.-Si no fuera un gran marco no la hubiera elegido. Soy libre de decidir, hago con mi colección lo que yo quiero y si así lo decidí es porque quedé impresionado. En general en España estoy muy impresionado por la seriedad y profesionalismo de sus museos. 
 
P.-Con la llegada de su colección se cierra el que muchos llaman ya el triángulo de oro del arte contemporáneo (Museo de Arte Abstracto-Fundación Antonio Pérez- Espacio Roberto Polo). ¿Cómo será este nuevo museo?
R.-El Museo de Cuenca tiene que tener una personalidad diferente al de Toledo, porque no debe lucir como una versión diluida del toledano. Mientras que Toledo se va a centrar más en las primeras vanguardias históricas, es decir, de principios del siglo XX, Cuenca va  albergar meramente arte del siglo XXI. Es lo que ha sido Cuenca siempre, de todos modos. Pero es un arte que no tenía hasta ahora porque procede del norte, este y Europa central. 
 
P.-¿Qué le parece el Archivo Provincial, edificio que fue sede de la Inquisición, como sede permanente?
R.-Es un edificio perfecto para un museo porque tiene pocas ventanas, o sea que cuando uno esté dentro se va a concentrar sobre las obras no sobre las vistas.
 
P.-Un edificio que necesita adecuarse y requerirá obras. Mientras tanto el alcalde de la ciudad ya ha ofrecido otros espacios como la Casa Zavala para que la colección se abra al público lo antes posible. ¿Qué le parece esta opción?
R.-He insistido mucho en que no quiero dar privilegios a una ciudad sobre la otra. Quiero que los dos museos abran más o menos simultáneamente. Aunque el Archivo aún tienen que rehabilitarlo, efectivamente el alcalde me propuso otro espacio donde se pudiera abrir de forma provisional hasta que la sede permanente esté lista.
 
P.-Incluso ya se ha bautizado el nuevo museo como ‘Espacio Roberto Polo’. ¿Será el nombre definitivo?
R.-El nombre de este museo, que será en realidad un museo con dos sedes, será ‘Colección Polo’. Un nombre sencillo igual que la Phillips Collection de Washington, la Frick Collection de Nueva York, o la Peggy Guggenheim Collection de Venecia, porque el origen del museo es una colección privada. Después con el tiempo se pueden agregar cosas que vengan de mecenas, de donadores… pero eso ya depende de los demás, no de mí.
 
P.-La intención es que en 2018 puedan abrir al público ambos espacios, el de Toledo y el de Cuenca
R.-Efectivamente, como ya ha dicho el presidente de Castilla-La Mancha lo que se pretende es que los dos abran antes del verano del año que viene. 
 
P.-¿Cómo le gustaría que fuera el proyecto expositivo?
R.-A mi me gustan las instalaciones donde las obras de arte puedan respirar, que no sean muy repletas y confundan al público. Las obras necesitan espacio alrededor de ellas para que se puedan admirar. No me gustan cuando son muy rellenas. Pero hay profesionales para ello, escenógrafos y arquitectos especializados en exposiciones, y España tienen muchos grandes en eso.
 
P.-A un gran mecenas como usted, ¿qué le parece que Castilla-La Mancha esté impulsando una Ley de mecenazgo que regulará iniciativas de patrocino dentro de la industria cultural?
R.-Es algo fantástico. Una de las cosas que puede proponer al mundo Castilla-La Mancha, y Toledo y Cuenca como ciudades Patrimonio de la Humanidad, es su historia, su cultura y su arte. En épocas pasadas hubo mucho arte extranjero, sobre todo de Flandes. El arte flamenco entró en España por primera vez  a través de Toledo de la mano de Carlos V pero después por razones históricas ese flujo de arte cesó. Pero ahora esto va a cambiar porque en las colecciones de España hay obras maestras de los antiguos maestros flamencos y alemanes, pero de esas mismas regiones del norte de Europa no hay nada de los siglos XX y XXI. Mis colecciones van a completar ese panorama que por el momento está ausente y que no está cubierto tampoco en las colecciones de museos madrileños.
 
P.-¿De las obras que finalmente vendrán a Cuenca, cuáles destacaría? 
R.-En el arte de un contemporáneo reciente hay obras de un gran fotógrafo de la Agencia Magnum, Carl de Keyzer, uno de los más grandes del mundo; también del gran pintor belga Werner Mannaers, o el americano Larry Poons, del que habrá una retrospectiva en los Museos Reales de Bélgica en Bruselas en marzo de 2020. Asismismo a Carl de Keyzer se le abre una retrospectiva en el mismo museo en el año 2020 que será itinerante y viajará por Europa y Norteamérica y, por qué no, puede venir a Castilla-La Mancha.
 
P.-Y como amante del arte, ¿qué obras del arte universal salvaría en caso de una debacle mundial? 
R.-Es una pregunta imposible de responder. Es como cuando a Federico Fellini antes de morir la famosa periodista francesa Anne Sinclair le preguntó en una entrevista cuál era su compositor preferido. Él respondió lo mismo que yo. Imposible responder esa pregunta porque amo diferentes obras por diferentes razones. Cada artista tiene un mensaje diferente. Me han marcado en distintas épocas diferentes cosas. Yo he hecho grandes descubrimientos de autores muy importantes que habían caído en el olvido por razones políticas o por haber sido mal manejados, o por razones religiosas…  y en distintas etapas de mi vida he descubierto artistas así. Por ejemplo, el belga vanguardista Paul Joostens, cuyas obras más importantes son de los años 1910 y 1920. Cuando yo estudié Historia del Arte nos enseñaban que el primer artista que hizo los collages Dada fue Kurt  Schwitters en 1919, pero cuando uno aprende algo más se da cuenta que el primer collage Dada es en realidad de Joostens de 1914.
 
P.-¿Cómo seguirán a partir de ahora las negociaciones con el Gobierno regional para perfilar los detalles de su cesión?
R.-Ahora es cuando viene el trabajo duro. Estamos trabajando con los diferentes consejeros del Gobierno, el de cultura, el de finanzas, el de patrimonio… hay diferentes responsabilidades implicadas. Yo no soy de aquí y me tengo que dejar guiar por ellos. Primero hay que preparar los edificios porque la obra no puede quedarse en un almacén. Los arquitectos deben hacer sus planes de intervención, también está la escenografía. Un museo no solo es la presentación de la obras, hay archivos, hay biblioteca, hay inventarios fotográficos y escritos detrás. Es un trabajo complejo, pero no imposible, simplemente hay que hacerlo. A mi eso no me da miedo, tengo costumbre.
 
P.-¿Estará usted supervisando estos trabajos personalmente?
R.-Como yo he hecho el amor con todas las obras de mi colección, creo que las conozco mejor que nadie.
 
P.-¿Habrá un antes y un después de la ‘Colección Polo’ en la oferta cultural de esta región?
R.-Definitivamente, y no solo de Castilla-La Mancha, sino de toda España, porque va a traer obras de artistas muy importantes que no existen en colecciones de museos españoles.