"El boca a boca y las redes sociales son la mejor manera de llegar a los consumidores"
“La verdad es que a mí siempre me han gustado las manualidades y se me han dado bien”, nos comenta Patricia Ruiz. Una afición que se convirtió en algo más cuando la creadora de 'Martina Handmade’ se quedó en el paro después de que la empresa en la que trabajaba realizase un ERE.
“A partir de ahí comencé con pequeñas invitaciones en el papel, me invitaron a una feria de bodas y los diseños tuvieron buena acogida, de ahí llegaron al Parador de Cuenca y ahí comenzó todo”, nos cuenta.
Casi cuatro años después, su labor como trabajadora y empresaria de una marca que plasma de manera artesanal diseños en papel, bolsos y otros artículos realizando creaciones únicas y personalizadas, no ha parado, llevándola a distintas ferias de artesanía. Este año debuta en Farcama Primavera, la Feria de Artesanía de Castilla-La Mancha que se celebra estos días en Cuenca.
“Es una posibilidad muy grande porque hasta ahora había estado en ferias de bodas y de artesanía de Cuenca, pero para esta que es a nivel regional se necesita un stock de productos importante, y al trabajar yo sola, lleva mucho esfuerzo”, afirma.
Todo un paso de gigante para su pequeña empresa ‘Martina Handmade’. Una propuesta emprendedora creada por esta conquense en 2015 y que, tras ser reconocida en los primeros premios Lanzadera de la Diputación, se propulsó hasta el día de hoy.
La propia Patricia reconoce que “es un camino de muchas horas de trabajo, empecé con el papel, luego la tela, y más tarde polipiel y otros tejidos”, toda una gama de recursos en los que impregnar su creatividad o la personalización de cada persona que le realiza un encargo. En este proceso, reconoce que las muestras y pequeñas ferias de bodas y artesanales han servido de impulso: “Hasta mi primera feria, ¡ni mi vecino sabía que me dedicaba a esto!, Cuenca es pequeña, pero es necesario moverse para que la gente sepa que estás haciendo algo diferente”, nos comenta entre risas.
ARTESANIA 3.0
Como buena artesana, el cuidado por los detalles es esencial en el trabajo que realiza. Pese a carecer de un taller al uso, utiliza una pequeña habitación de su hogar como centro de trabajo, aunque reconoce que el salto a la tienda física “debe ser el próximo paso”, mientras “el boca a boca y las redes sociales son la mejor manera de llegar a los consumidores”.
Es precisamente ese paso hacia lo digital que Patricia reconoce de “fundamental y absolutamente necesario en la época en la que vivimos”, lo que le ha reportado un éxito en sus pedidos: “Al principio abrí una cuenta de Facebook y subía lo que hacía, luego una página web que actualmente sirve como catálogo e información, y también uso Instagram, que lo uso para subir las fotos de los productos”, afirma, aunque reconoce que los mejores reacciones son los regalos a madres que llevan sobreimpresionado el dibujo del colegio de sus hijos, “te provoca una satisfacción impagable”.
En la amplia variedad de su catálogo pueden encontrarse invitaciones, cartelería, bolsas, mochilas, fundas; además de colecciones especiales como su ‘Serie Cuenca’ donde los artículos llevan impreso un diseño de la imponente vista de la hoz del Huécar, así como colaboraciones con diseños de otros artesanos como el ceramista Rubén Navarro o la tienda ‘Mé Dusa - Arte Baul’.
En cuanto al futuro, Patricia es optimista: “lo veo alentador, pero pasa por ampliar esto, porque cada vez hay más demanda”. Todo un buen augurio para esta artesana conquense.
