“Una miss debe tener actitud y seguridad. Las medidas son lo de menos”

Anabel Saavedra Ramírez es de Alarcón, tiene 17 años y va a ser la representante de Cuenca en el certamen de Miss Mundo España 2019, cuya gala se celebrará el 18 de agosto en Melilla. La joven, a la que le interesa el mundo de la moda y también le gustaría estudiar Criminología, destaca que para participar en este tipo de certámenes, lo que hace falta sobre todo es tener “actitud y seguridad. La altura y las medidas son lo de menos”. “Se valora la belleza con un propósito”, asegura.

De hecho, ese es precisamente el lema del certamen en esta edición: ‘Belleza por un propósito’. Y eso es lo que las 52 candidatas, representantes de las diferentes provincias españolas y de las ciudades autónomas de Melilla y Ceuta, tendrán que demostrar en el concurso. Antes de la gala final, del 9 al 18 de agosto, las aspirantes deberán enfrentarse a un maratón de pruebas físicas y de pasarela que se desarrollarán también en Melilla. Entre ellas, tendrán que vestir los trajes tradicionales de sus tierras respectivamente.

Y Anabel Saavedra se está preparando a conciencia para pasar estas pruebas con nota desde que el pasado 29 de junio se coronó como Miss Cuenca en una gala celebrada en el municipio conquense de Iniesta en la que se eligieron a las representantes de diferentes provincias de la región y a Miss Castilla-La Mancha.

"Si tú demuestras en el certamen que no eres solo un físico, les vas a gustar como persona. Eso es lo que tienes que reflejar en el concurso de Miss Mundo España. El jurado tiene que ver ilusión en ti”

Con el objetivo de afrontar las diferentes pruebas del certamen de la mejor forma posible, la joven se está preparando yendo al gimnasio, practicando natación y cuidando la alimentación. “Voy un poco justa de tiempo”, reconoce, aunque eso no le impide enfrentarse al certamen con gran optimismo.

“Si quieres realizar tu sueño, vas a buscar la manera para llegar a él”, apunta la joven, que recuerda que para participar, se puso en contacto con el delegado del certamen en Castilla-La Mancha. “El año pasado ya fui a ver la gala de belleza de 2018 para ver si me gustaba de verdad este mundo. Quería ver que no era un simple capricho para mí. Y me gustó mucho la sensación. Lo llevo soñando toda la vida aunque cuando estás a punto de llegar a ello, te planteas si realmente es lo que quieres”, matiza. Sin embargo, lo tuvo claro y decidió presentarse al concurso.

La joven conoce este mundillo porque lleva trabajando desde los 16 años como modelo, especializada en retratos. Pero recalca que “no es lo mismo ser miss que modelo”. “Es muy diferente. Me lo han dicho muchas veces. No es lo mismo el caminar de una miss, en una pasarela, las posturas. Hay que tenerlo claro. Son preparaciones muy distintas aunque parezca que son dos cosas muy parecidas”, señala la representante de Cuenca.

“Yo empecé como modelo porque es algo que siempre me ha gustado mucho. Las primeras veces que me fotografiaron y hasta que no me metí en agencias, no tenía experiencia. Lo hacía para ponerme delante de las cámaras y coger soltura. Si quieres algo, vas a por ello”, insiste la joven conquense.

Pero además de la preparación de las pruebas físicas, las participantes en el certamen de Miss Mundo España deben presentar también un proyecto social y un vídeo sobre este. La joven está centrando su trabajo en las organizaciones Cruz Roja y la Confederación Española de Personas con Discapacidad Física y Orgánica (Cocemfe). “Mi proyecto se basa en mi familia”, explica, detallando que sobre todo es un homenaje a su hermano, que sufría discapacidad y al que perdió cuando este tenía apenas 13 años.

MÁS APOYO

“Hace falta más apoyo económico y que no se les rechace porque si mi hermano sufrió algo, fue mucho rechazo”, reclama, precisando que este proyecto es una manera de dar visibilidad a estas personas. Además, en el proyecto que está preparando también rinde homenaje a su madre, que ha criado sola a sus cuatro hijos. “Es un gran esfuerzo”, subraya. Además, también debe hacer un vídeo-presentación de la provincia de Cuenca.

A la joven, que está estudiando Bachillerato de Ciencias Sociales en su localidad y tiene el B2 en Inglés, le gustaría dedicarse en el futuro a la criminología. “Siempre me ha apasionado”, cuenta.

El próximo agosto, tendrá que desplegar todas sus aptitudes para convencer al jurado. Pero tiene claras las claves: “Si tú demuestras que no eres solo un físico, les vas a gustar como persona. Eso es lo que tienes que reflejar. Tienen que ver ilusión en ti”.