"La mayor dificultad es la búsqueda de vivienda”
La poeta somalí Warsan Shire escribió que “nadie pone a su hijo en un barco a no ser que el agua sea más segura que la tierra”. La frase resume con dureza lo que es el drama de los refugiados y por lo que tienen que pasar muchos de ellos, especialmente los que tienen familia a su cargo. Este 20 de junio se conmemoraba el Día Mundial del Refugiado con cifras que dan miedo: más de 65 millones de personas se ven obligadas a marcharse de sus casas y de ellos la mitad son niños. Organizaciones como Cruz Roja los acogen y les ayudan a integrarse en los países a los que llegan. Jesús Esteban es el presidente de la organización en Castilla-La Mancha.
-Por desgracia el problema de los refugiados se repite en muchos momentos de nuestra historia, personas que tienen que dejar su casa por distintos motivos como las guerras… ¿desde cuándo lleva Cruz Roja trabajando con ellos en Castilla-La Mancha?
Desde finales de los años 70 Cruz Roja atiende a personas refugiadas con un programa estable de intervención.
-¿Cuáles son los aspectos más destacados del programa de acogida a refugiados? ¿Cuál es el servicio que en su opinión es fundamental?
Creo que el aspecto más destacable del programa de atención es la integralidad y la individualización de la atención. Se ofrece a las personas acogidas una intervención partiendo de un diagnóstico de su situación y abordando facetas como el aprendizaje del idioma, el apoyo jurídico, la atención psicológica, la escolarización de los menores, asistencia sanitaria y farmacológica, la formación, la capacitación, …. Es decir, se adapta el programa de trabajo a las necesidades de las personas y a sus circunstancias especiales.
-¿Funciona igual en todas las provincias?
El programa establecido es realizado en todas las provincias de la misma manera, adaptado, como había comentado anteriormente a las circunstancias personales.
-¿Cuántos refugiados se han atendido en el último año en Cuenca? ¿Cuál es el perfil y nacionalidades de las personas que llegan a nuestra provincia?
Cruz Roja Cuenca ha atendido a 28 personas solicitantes de asilo y refugio en lo que va de año de cinco nacionalidades distintas: venezolana, colombiana, ucraniana, pakistaní y jamaicana. Más concretamente, hablamos de cinco familias que tienen entre uno y cuatro hijos o de personas que han venido solas o acompañadas de algún familiar. La edad media ronda los 30 años y todos poseen estudios medios o superiores.
-¿Se ha incrementado la cifra respecto a años anteriores?
Sí, se ha producido un incremento de plazas respecto a las existentes en 2015.
-¿Cuántos son menores? ¿Llegan muchos solos? ¿Qué atención reciben en este caso?
Los menores no acompañados están protegidos por la normativa internacional de infancia. En este caso, la responsabilidad de su atención corresponde a las Comunidades Autónomas dentro de sus programas de atención al menor, no en los programas de Protección Internacional.
-¿En el caso de las familias acogidas en Cuenca, está siendo buena su integración?
La integración de las familias acogidas en el programa ha evolucionado de manera muy positiva. Ayuda el hecho de que las personas acogidas son realmente participativas y tienen mucha voluntad para convertirse en autónomas cuanto antes. Acuden a todas las actividades propuestas y organizadas por la entidad, también a las organizadas a nivel local por otras entidades públicas o privadas y asisten de forma autónoma a las citas concertadas. Hablamos de personas muy responsables y sociables, prueba de ello es que, en estos meses, han conseguido crear una red de apoyo en Cuenca y contar con nuevos amigos.
La principal barrera con la que se encuentran algunos de ellos es el idioma. En algunas ocasiones y hasta que adquieren el dominio suficiente del idioma, necesitan ser acompañados por personal del equipo o voluntarios. Para allanar estas dificultades, reciben clases de castellano diariamente, unas quince horas a la semana, en la idea de facilitarles una autonomía e integración completa con la mayor prontitud posible. Otro dato de esa integración es que los menores están escolarizados e integrados en el aula y sus progenitores realizan un seguimiento directo de sus hijos en el colegio, asistiendo a las reuniones de padres y concertando tutorías con los profesores.
-¿Qué es lo que más les preocupa cuando llegan?
En un primer momento, el desconocimiento del programa y lo que realmente significa la protección internacional. Luego, manejarse en la ciudad y integrarse en un nuevo entorno. El aprendizaje del idioma, la escolarización de sus hijos, la búsqueda de empleo, formarse o la posibilidad de homologar sus títulos, son otras de las cuestiones que pueden inquietarles. Igualmente, la situación de los familiares que aún siguen viviendo en sus países de origen, a veces en situaciones muy complicadas, y la posibilidad de la reagrupación familiar.
-¿Responde bien la sociedad conquense?
La respuesta por parte de la sociedad conquense está siendo generosa. El personal sanitario, el profesorado, las instituciones públicas, las organizaciones deportivas…, se han mostrado especialmente colaboradoras con esta situación.
La mayor dificultad es la búsqueda de vivienda a la hora de alquilar a personas que no disponen de un contrato laboral
"Hay historias personales que impactan pero me quedo con lo positivo, con su capacidad de superar las duras condiciones en las que abandonan su país"
-¿Cuántas personas de Cruz Roja trabajan en Cuenca en este programa?
El equipo multidisciplinar que trabaja en Cuenca está compuesto por 6 profesionales: un trabajador social, un educador social, un psicólogo, un abogado, un técnico de empleo y un administrativo. Además, se cuenta con un grupo de 10 voluntarios que les apoyan en el aprendizaje del castellano, reforzando el aprendizaje educativo de los menores, acompañándoles a realizar gestiones cuando es necesario, haciendo traducciones o funciones de intérprete.
En el caso de la Comunidad Autónoma de Castilla-La Mancha se cuenta con un equipo de 224 voluntarios y 34 técnicos.
-¿Existe el compromiso suficiente de las administraciones regionales y locales sobre todo en lo que se refiere a facilitar viviendas y alojamiento?
Hemos encontrado una gran sensibilidad en las administraciones públicas de cara a facilitar la atención. La vivienda, con ser importante, es un elemento más, al cual hay que añadir elementos como la atención sanitaria, la escolarización, la participación social, la formación, …todos ellos de gran importancia a la hora de abordar la integración.
-¿Qué opinión le merece la decisión del Gobierno de acoger a los inmigrantes del Aquarius? ¿Es algo que deberían imitar otros países?
La situación humanitaria de las personas debe ser prioritaria. Existen normas y acuerdos internacionales que obligan a los Gobiernos y que deben cumplirse.
-Imagino que habrá historias que le habrán impactado de manera especial ¿Nos puede contar alguna de ellas?
Desde luego hay historias personales que impactan, pero prefiero quedarme con lo positivo. Destacaría sobre todo la capacidad para superar las duras condiciones en que se ha desarrollado su salida y cómo las personas acogidas se esfuerzan en salir adelante día a día.
-El rechazo o reticencias a acoger refugiados es una realidad en parte de la sociedad, ¿qué mensaje les daría a aquellos que lo ven como un problema o hablan del efecto llamada?
Tengo la impresión de que se trata más de un mensaje construido intencionadamente que de una realidad muy extendida. Salvo casos aislados, no nos hemos encontrado situaciones de este tipo.
-¿Vivimos en una de las peores épocas en lo que a emergencias humanitarias se refiere? ¿Cómo se puede ayudar?
Lo fundamental es ayudar a construir sociedades, ciudades, barrios en los que las personas, todas las personas, puedan convivir, mantener una actitud positiva hacia la integración y apoyar el trabajo que se está realizando por parte de las entidades que están trabajando en estos proyectos. De forma más concreta, invitamos a las personas que puedan estar interesadas en colaborar a que contacten con nuestra Asamblea en Cuenca.
Cruz Roja Española es una de las organizaciones que participan en la gestión del programa de acogida a personas solicitantes de protección internacional en España, financiado por el Ministerio de Empleo y Seguridad Social. La intervención consta de varias fases que cubren desde la acogida temporal hasta la integración y la autonomía de los participantes, con una duración de 18 a 24 meses.
Las personas con el que se está trabajando son realmente participativas, muy comprometidas en acciones que se les plantean (clases de castellano, entre otras) y con alta autonomía casi desde el comienzo del proceso, por poner algún ejemplo, acuden de manera independiente a las citas concertadas con entidades, servicios públicos o centros de salud, si bien el idioma, sigue siendo un impedimento para algunos de ellos y en ese sentido, requieren del apoyo del equipo de técnicos.
La entidad humanitaria diseña itinerarios personalizados de inserción socio laboral que cubren todas las necesidades básicas de los refugiados y solicitantes de Protección Internacional, ofreciéndoles, entre otros, servicios de apoyo jurídico, psicológico, traducción e interpretación, aprendizaje del idioma, ayudas económicas, formación, orientación e intermediación laboral.
Cruz Roja cuenta actualmente con 2.507 plazas de acogida en 46 provincias, siendo el porcentaje de ocupación de más de un 90%; se espera poder ampliar esta red hasta las 2.562 plazas. Las nacionalidades más comunes de las personas atendidas por Cruz Roja (9.500 en los 5 primeros meses del año) son venezolanas, colombianas, ucranianas y sirias. Un 25% de los atendidos son menores de edad.
El incremento del número de solicitantes de asilo es uno de los retos, pero no el único. Otra de las necesidades que tiene actualmente la Organización Humanitaria es el de poder disponer de voluntariado capacitado para enseñar el idioma a las personas refugiadas y, también, poder contar con pisos de alquiler para estas personas que huyen de la guerra o de la persecución.
Con el objetivo de concienciar sobre los retos que afrontar las personas solicitantes de Protección Internacional en España, Cruz Roja Española acaba de poner en marcha la campaña ‘Ahora que están aquí, te necesitan más cerca’.
Esta campaña también quiere promover la reflexión e informar a usuarios, organizaciones, instituciones públicas y privadas sobre la importancia de su participación en el proceso de integración.
