"Hay niños que no buscan competir, simplemente jugar y hacer alguna actividad física"
Desde octubre de este año un nuevo club se ha sumado a la escena deportiva conquense: el Club Balonmano ‘Isaac Albéniz’. El alma máter de este proyecto es Víctor Manuel Martínez, amante de esta disciplina como jugador que fue y más recientemente en su papel como entrenador.
Este Club germinó en las pistas del Colegio ‘Isaac Albéniz’, de ahí su nombre, donde Martínez ha estado entrenando cinco años dentro de las actividades que oferta el AMPA. Según explica, él y un grupo de padres se dieron cuenta que cuando los chicos acababan Primaria solo tenían la posibilidad de ir al Liberbank Ciudad Encantada si querían seguir con este deporte. “Es un equipo en División de Honor, que está jugando de maravilla y tiene nivel, pero se perdía algo, porque hay niños que no buscan competir, simplemente jugar y hacer alguna actividad física”.
Por eso decidieron apostar por esta alternativa para jóvenes de 12 a 15 años. “No importa que no hayan jugado nunca porque estamos para enseñarles, además de inculcarles valores como el trabajo en equipo, el compañerismo y el juego limpio”, apunta el entrenador.
El Club ya cuenta con una cantera de 16 jugadores y participa en los campeonatos de deporte en edad escolar. “Salimos a divertirnos, sin presión”. Pero madera hay. Con tan solo dos meses de entrenamiento ya han ganado algún partido contra equipos que ocupan los primeros puestos de esta liga regional. Porque dentro de la pista “luchamos como los que más”. Aunque Víctor Martínez asegura que “no busco que un chico meta 15 goles sino que jueguen todos, nada de fomentar la competitividad entre ellos. Pretendo que se lleven bien y que se vean como un equipo”.
En su opinión, el balonmano es un deporte que engancha porque es muy dinámico. También, a nivel físico, es muy bueno para la coordinación corporal y visual.
Le gustaría que sus jugadores garanticen el futuro del Club y que , siguiendo sus pasos, se saquen el título de entrenador para coger el testigo. “Yo tengo que cumplir un ciclo, no puedo estar aquí toda la vida”. Otro de sus sueños es que saliera un equipo femenino “porque en Cuenca no lo hay”. Y puestos a pedir, por qué no, tener una peña propia, al estilo de la Furia Conquense. “Ahora el que animo soy yo, pero no me importaría. Cualquier cosa que sea ayudar a este deporte bienvenida sea”, precisa. Martínez no quiere hablar de competencia con el Ciudad Encantada. “No estamos en la misma liga y con el tiempo se verá que esto es positivo. Además, si sale algún jugador bueno se lo llevarán ellos. Sergio López salió de las escuelas municipales. Es muy bonito para la ciudad que surjan nuevos proyectos y que se vaya viendo la labor”, subraya.
Para los interesados en sumarse al ‘Isaac Albéniz’, el Club entrena todos los martes y los jueves de 19 a 20 horas en el Polideportivo Fuente del Oro. De momento las plazas son limitadas, porque Víctor es el único entrenador, pero espera que poco a poco vayan a más “porque no queremos que ningún chaval que quiera jugar se quede fuera”.
Queda demostrado que en la capital conquense hay ilusión y vida deportiva más allá del fútbol.
