Garrote: “La extrema derecha nos quiere llevar a un tiempo pasado”

Fernando Garrote (Cuenca, 1995) es técnico superior en Administración y Finanzas y está a falta de concluir el Trabajo de Fin de Grado (TFG) para ser egresado en Derecho. Una TFG que, por cierto, versa sobre la remunicipalización de servicios públicos en el Ayuntamiento de Cuenca, que reivindica. “Hay servicios externalizados, como el transporte urbano, que no funcionan bien, todo el mundo se queja porque llega tarde, porque no se sabe la hora de paso con precisión, y creemos que a través de una apuesta municipal se podría conseguir mejorar la situación”, cuenta.

Es el candidato más joven al Congreso, ¿qué le ha llevado a presentarse?

Hay muchas razones. La primera porque soy joven, y los jóvenes solo tenemos dos opciones: movernos para cambiar las cosas o movernos para irnos, y yo he elegido moverme para quedarme. Además, a mí siempre me han enseñado el valor de cuidar, de ayudar a los demás, al entorno más cercano, a Cuenca. Es algo que por ejemplo he visto en mi madre, que trabaja en el hospital y es su manera de cuidar a las personas. La mía es hacer política. Sobre todo nos tenemos que cuidar del Partido Popular y de sus hijos, que están haciendo una serie de políticas en la provincia bastante desastrosas: nos han quitado servicios públicos, han recortado en atención médica, en atención educativa, lo que hizo que mucha gente saliéramos a la calle.

¿Ha mejorado Castilla-La Mancha en esta legislatura?

Va a pasos lentos, nos gustaría conseguir muchas más cosas pero el PSOE se resiste, le tenemos que conseguir las cosas un poquito tirándole del carro. El salario mínimo interprofesional sin duda es un logro. En la provincia pedimos que se garanticen los servicios públicos, que se invierta en atención médica, en escuelas, que no se desmantele la Guardia Civil. Y, sobre todo, que se invierta en internet: en todas las últimas intervenciones que hemos tenido en el Congreso de los Diputados hemos pedido que se garantice la conexión a internet en la provincia, porque la actual es muy mala e internet es imprescindible para trabajar en la capital o en cualquier pueblo.

El acceso a internet es fundamental para luchar contra la despoblación, pero harían falta más medidas….

Principalmente hay que garantizar un trabajo, porque si no la gente se marcha. Y ahí nosotros, frente al modelo de la economía de las basuras de las derechas, que nos está llenando la provincia de macrogranjas y nos quiere traer el cementerio nuclear y el mayor vertedero en Almonacid del Marquesado, queremos un modelo de industria verde, que apueste por generar trabajo a través de las energías limpias, renovables, a la vez que se abarata la factura de la luz. Creo que la provincia de Cuenca puede generar energías limpias a través la corteza de los montes, la biomasa, las placas solares, los molinos eólicos, y crear así bastantes puestos de trabajo.

En la capital sí se está apostando por la biomasa, pero no sé si lo suficiente…

Efectivamente, no se está haciendo lo suficiente por la industria verde cuando el sector de las renovables puede ser la baza del futuro para esta provincia.

¿Cómo ve a la gente de su generación, los jóvenes? ¿Tienen trabajo?

La situación en Cuenca está muy difícil y muchos de mis amigos, de mis compañeros, de mis familiares, se están marchando. Yo, moviéndome mucho, he tenido algún trabajo pero esporádico, como administrativo, teleoperador y en la vendimia. No hay trabajo y esa es una realidad. La administración pública tiene que atenderles y satisfacer las necesidades de los ciudadanos. Tiene que fomentar políticas para que los jóvenes se queden en el territorio. Eso es fundamental.

La Junta ha apostado por la cultura ligada al turismo, con exposiciones de Ai Weiwei o Viola. ¿Qué le han parecido?

Los sectores de Cuenca son tres. Está el de las energías renovables, que no se está explotando y nosotros lo vamos a explotar. También la agricultura y la ganadería, donde pedimos que se paguen unos precios justos a los agricultores. Y el tercero es la cultura, sustancial en Cuenca capital y en la provincia. Nosotros también apostamos por ella, creemos en ella y queremos que sea accesible a todos. Ligada al turismo, puede ser también una gran baza. Aunque tampoco nos podemos olvidar de nuestra propia cultura como conquenses, que en cierta medida la estamos perdiendo. Tenemos que reivindicar nuestras tradiciones, nuestra seña de identidad.

¿A qué tradiciones se refiere?

Por ejemplo, en unas semanas van a ser los mayos, pero cada vez hay menos gente que los celebra. Lo mismo sucede con las hogueras del 2 de mayo, que ya apenas se hacen. O con la fiesta de los gancheros. Son identidad de Cuenca y hay que reivindicarlas.

En el PP abogan por tradiciones como la caza, los toros y la Semana Santa…

La Semana Santa es vital, una seña de identidad que, por supuesto, hay que respetar y proteger. Pero la caza y los toros no generan empleo. Parte de mi familia se ha dedicado al mundo del toro y lo sé perfectamente. Solo genera riqueza a cuatro ganaderos, y Cuenca en eso no sobresale. En la caza ni siquiera ganan dinero los que participan en ella. Si acaso el empresario, que es propietario del coto y ni siquiera vive en Cuenca, sino en Madrid. Lo que genera empleo de verdad es la apuesta por las energías renovables.

Se está crispando demasiado la política con la aparición de Vox y cierto giro hacia la extrema derecha?

A mí el tema de que aparezca Vox me preocupa. Pero me preocupa más lo que haga Luis Carlos Sahuquillo, el diputado del PSOE, o Rafael Catalá, el del PP. Porque si Vox alcanza un diputado, ¿qué van a hacer? ¿Van a volver a pactar con el PP para facilitar el gobierno? ¿Van a pactar con Cs? ¿Con ese PP y ese Cs que en Andalucía gobierna con Vox? Eso es muy peligroso. Hay que tener las cosas claras y nuestra prioridad es parar a esta gente. Por eso creo que el voto útil es Unidas Podemos con el fin de poder parar a la extrema derecha que nos quiere llevar a un tiempo pasado, a la peor etapa de nuestra historia. Catalá también me preocupa porque ha sido ministro y puede volver a ser ministro, pero, ¿va a hacer algo por Cuenca? Es una pregunta que muchos nos hacemos. Tenemos que ser conscientes de que Podemos es uno de los grupos que más ha preguntado por la provincia en el Parlamento, mientras que esta gente lleva muchos años viviendo de la política y la situación de la provincia cada vez es peor: todos tenemos la sensación de que mucho no trabajan por Cuenca.

Con Catalá de ministro se obtuvo la declaración de interés público de la línea del AVE Madrid-Cuenca, lo que luego ha permitido poner en marcha algunos trenes más económicos, aunque, según muchos ciudadanos, insuficientes…

El problema del AVE es que no es accesible a todo el mundo. La estación está fuera de la ciudad. Y hay muchos pueblos sin transporte público. Otros tienen el tren convencional, pero este pasa de uvas a peras, sin buena conexión con la capital, y con muchos tramos en los que no va a más de 60 km/h. El tren es una apuesta en la que hay que invertir, porque se llevan casi 40 años sin inversiones reales. Puede vertebrar la provincia y dar vida a los pueblos. Siempre pongo el ejemplo de mi abuela, que vive en Santa María de los Llanos, su hospital de referencia es Alcázar de San Juan pero no tiene un autobús que le lleve al hospital. Lo mismo ocurre con muchos pueblos de la Sierra, sin conexión por autobús con la capital. Eso es una necesidad que los ciudadanos demandan, porque, cuando uno decide vivir en el mundo rural, es porque quiere tener los mismos derechos que el que vive en Madrid pero en un mundo tranquilo, dedicado a la agricultura, a la ganadería o a las energías limpias.

Parece que para que gobierne la izquierda se tendrán que poner de acuerdo, entre otros partidos, Podemos y PSOE. ¿Cómo ve esta posibilidad?

Para eso, como decía, tenemos que saber qué quiere hacer Luis Carlos Sahuquillo, si va a pactar con PP o Ciudadanos, esos que gobiernan en Andalucía junto con Vox, o si va a apostar por un gobierno de cambio, por la España del siglo XXI. Nosotros lo tenemos claro, aunque los pactos de gobernabilidad tendrán que venir después de las elecciones. Creemos que hemos hecho un buen trabajo, que hemos conseguido muchas cosas presionando al PSOE, muchas que nosotros habíamos propuesto mediante leyes y que nos habían tumbado en el Congreso y que afortunadamente ahora han salido, como el salario mínimo interprofesional, la ampliación de la paternidad o la revalorización de las pensiones.

La derecha reprocha el diálogo con los independentistas, aunque para buscar una solución habrá que dialogar…

En política hay que hablar, es algo sustancial. Y la cuestión catalana no es un problema que se solucione de la noche a la mañana ni con palos: hay que solucionarla con diálogo. Nosotros creemos que el modelo territorial de España está agotado y hay que apostar por una España de futuro, de progreso, donde Cataluña esté dentro y donde todos podamos hablarnos de tú a tú como hermanos, en fraternidad. Una España que mire hacia delante. Y creo que el 28 de abril la podemos conseguir. Es un momento histórico.

Cuando se critica tanto el diálogo con los independistas se fomenta el frentismo entre Cataluña y el resto de España…

Aznar hablaba catalán en la intimidad, y nadie se lo reprochaba. Mariano Rajoy medió con los independentistas a través de Urkullu. Al final, en política todo el mundo habla. Lo que pasa que nosotros no nos escondemos: hablamos con todos, con independentistas, con gente de derechas y con gente de izquierdas. Y lo hacemos para reivindicar que queremos una España plural y, en el caso de Cuenca, que se refuercen los servicios públicos, que se genere trabajo, que haya una buena conexión a internet y tengamos unas buenas comunicaciones por transporte público.

"Nosotros no nos escondemos: hablamos con todos, con independentistas, con gente de derechas y de izquierdas para reivindicar que queremos una España plural y que se refuercen los servicios públicos"

El candidato del PP a C-LM no tiene claro si continuar con las obras del hospital. ¿En Unidas Podemos qué opinan?

Ahora mismo el hospital se ha quedado muy anticuado, pero yo tengo que poner en valor que tiene profesionales muy buenos y hace un muy buen trabajo. Y el hospital nuevo se está construyendo ya, la inversión está hecha, entonces no podemos echarnos para atrás. El PP lo sabe por mucho que ahora diga que no. ¿Cuál va a ser si no su política de atención sanitaria? ¿La que ha hecho su amigo Juan Manuel Moreno en Andalucía, que es enviar toda la lista de espera a la sanidad privada? ¿O la que hizo Cospedal aquí cuando llegó, sacar la tijera y podar? Si ese es su modelo, nos van a tener siempre enfrente. Nosotros apostamos por unos servicios de calidad, por una sanidad pública tan buena como la que tenemos aquí en Cuenca, aunque mejorable.

Podemos va para abajo en las encuestas tras la gran expectación que generó su formación en 2014...

Siempre los poderosos nos han querido dar por muertos. Pero demostramos en 2015, demostramos en 2016, que estamos más vivos que nunca y estamos aquí para reivindicar esa España plural, de futuro y progreso. En cierta manera, esa bajada se debe a esa información putrefacta que han dado las cloacas del Estado a través del periódico Okdiario, ahora mismo un escandalazo en todo el país. Mientras aquí en la provincia se están desmantelando cuarteles de la Guardia Civil y se está acabando con el derecho a la seguridad de nuestros ciudadanos, ese dinero se lo han llevado para generar pruebas falsas contra Podemos. Es una de las cosas más graves que han pasado después del 23F. Y creo que los ciudadanos se están dando cuenta de que esto es algo que no se puede tolerar en democracia.

Para terminar, ¿cómo ve Cuenca capital?

Cuenca tiene que ser una ciudad mucho más amable con el ciudadano, es muy inhóspita en algunas calles, donde no hay ni siquiera un árbol. La movilidad depende del coche o de que vayamos andando, no hay sistema de bicicletas… Y lo más importante: necesitamos trabajo, sin trabajo la gente se marcha. Necesitamos servicios públicos. Yo amo Cuenca, me enseñaron a cuidar lo que nos rodea, y me gustaría quedarme aquí. Los jóvenes tenemos que reivindicar nuestra ciudad y poder vivir en este entorno.