“El cine de Cuenca está haciendo historia”

Tras El emisario (2018), premiado con una de las tres primeras distinciones del Certamen de Cortometrajes de Castilla-La Mancha, Ignacio Oliva (Murcia, 1963) se ha puesto de nuevo tras la cámara para dirigir junto a sus alumnos del Máster de Investigación de la Facultad de Bellas Artes el cortometraje Dirección única, centrado en la trágica muerte del filósofo alemán Walter Benjamin en Port Bou, en septiembre de 1940.

¿Qué te llamó la atención de la muerte de Walter Benjamin para llevarla al cine?

Walter Benjamin murió en extrañas circunstancias, nunca del todo aclaradas. La versión oficial dice que se suicidó con morfina, pero hay muchos puntos oscuros que han alimentado todo tipo de interpretaciones. Juan Goytisolo pensaba que fue asesinado. Se ha escrito mucho sobre este episodio dado que Benjamin es uno de los filósofos más influyentes del siglo XX y también se han hecho algunos documentales y el docudrama La última frontera (1991) pero Dirección única es la primera película que aborda este episodio desde el territorio exclusivo de la ficción.

Dirección única es precisamente el título de un libro de Walter Benjamin, ¿qué relación hay entre esta película y el libro?

Es un homenaje, una cita, una metáfora. Benjamin compuso este libro a finales de los años veinte como un conjunto de aforismos sobre su época, inmersa en un camino de dirección única hacia la catástrofe. Y fue bastante visionario, habida cuenta de lo que sucedió pocos años después. Lo más terrible es que el propio Benjamin tuvo que hacer un camino sin retorno hacia su propia destrucción en su huida de esa catástrofe.

¿Y en qué se centra el filme?

La película tiene dos partes: una sucede en la montaña y la otra en el Hotel Francia de Port Bou. Walter Benjamin estaba exiliado en París desde principios de los años treinta, donde había llegado desde Berlín huyendo de la persecución nazi, pero la rápida e inesperada ocupación de Francia por parte de la Wehrmacht en junio de 1940 le hizo buscar una salida en Marsella, en cuyo consulado sus amigos Adorno y Horkheimer le habían conseguido con mucho esfuerzo un visado de entrada en los Estados Unidos. Pero ya era tarde, los nazis habían cerrando el Mediterráneo. Nuestra historia arranca aquí, en esa situación desesperada en la que un hombre enfermo del corazón se ve obligado a seguir una antigua ruta de contrabandistas en el pirineo catalán (una parte de la famosa Ruta Lister, por donde salió en retirada la Brigada Lister del ejército republicano) para intentar cruzar España y embarcar desde Lisboa hacia los Estados Unidos. Dirección única cuenta la dura subida por Ruta Lister y los oscuros sucesos posteriores sucedidos en el Hotel Francia, donde fueron alojados esa noche para ser deportados al día siguiente.

Dirección única forma parte de una trilogía…

Efectivamente, es una trilogía sobre el fascismo con tres historias que coinciden en el tiempo, concretamente en el otoño de 1940. El emisario fue la primera, Dirección única (2019) es la segunda y la tercera la rodaremos, si todo va bien, la próxima primavera: se titulará Rock of Gibraltar (2020).

¿Cuando se podrá ver?

Será en los Cines Odeón en el próximo mes de octubre, coincidiendo con la inauguración del cineclub universitario del Vicerrectorado del campus de Cuenca y el Centro de Actividades Culturales, que han participado junto a la Facultad de Bellas Artes en la financiación de esta iniciativa. Toda la ciudad está invitada a ver su cine, el cine que se hace en Cuenca y que está haciendo historia.