Con una experiencia de más de 30 años como ingeniero de mecánica y solo cuatro como artista, su gran pasión, el iraní Riaz Sanatian ha instalado en el Salón de Actos del Palacio Provincial de la Diputación de Cuenca una exposición titulada ‘Estratos’, con la que se presenta por primera vez al público conquense.
Una obra totalmente inédita en la que, tal y como ha remarcado el artista, juega un papel relevante el objeto encontrado, guardando grandes similitudes con la colección de la Fundación Antonio Pérez (FAP. En su opinión, una manera de entender el arte, en la que a los objetos sin una utilidad aparente, se les otorga una segunda oportunidad volviendo a la vida desde un punto de vista artístico y sujeto a la interpretación del público.
Sanatian ha querido agradecer al presidente de la Diputación esta oportunidad de mostrar su obra al público de Cuenca, esperando que sea del agrado de esta ciudad, de la que se confesó totalmente prendado y enamorado.
Ha definido su obra como “una expresión de sus sentimientos”. Y es que considera que “la vida no es lo que se aprecia a primera vista, sino que hay otras dimensiones más allá, otros estratos” y, precisamente, sus creaciones abstractas le sirven de “medio de expresión” de esas sensaciones y sentimientos. De ahí que Sanatian opte por no poner título a sus obras con el único objetivo de que sea el propio espectador el que “bautice” cada una de sus piezas y le ponga el nombre que le sugiera.
Estratos
Esta exposición, que permanecerá instalada en el Palacio Provincial hasta el próximo 11 de marzo, reúne un total de 41 obras, fruto del trabajo de los últimos dos años e inspiradas y concebidas en su mayoría en Cuenca, salvo tres de ellas creadas en Londres, donde también reside en ciertas temporadas del año.
‘Estratos’ es la primera exposición individual de este artista iraní, en la que destaca la amplia variedad de técnicas empleadas en cada uno de sus cuadros, destacando la tinta sobre papel fotográfico o metal oxidado, la pintura al óleo sobre papel o placa de acero oxidado o la cinta de película sobre papel, mientras que en sus composiciones cobra especial protagonismo el objeto encontrado.
Sanatian imprime su sello personal en sus obras, eminentemente abstractras, en las que las imágenes suelen ser monocromáticas o elaboradas con una gama limitada de colores sobrios, los trazos se enmarcan en un espacio rectangular claramente definido y las líneas pueden ser geométricas, de inspiración caligráfica o puramente abstractas, que dejan entrever diversas capas, que sugieren esos estratos a los que hace referencia el autor cuando habla de la vida.
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